Seguramente para algunos será un mando, o pad, horrible. Para otros puede que sea el mejor controlador que ha existido nunca en el mundo de las consolas. Como reza el dicho “para colores, sabores”. En la conferencia de anoche, los de Redmond anunciaron la retrocompatibilidad total con la primera Xbox, y por eso, a alguien se le ocurrió que sería buena idea sacar una versión actualizada de este peculiar mando.
“The Duke“, que es como se le conoce, fue famoso durante los primeros años de la primera Xbox por su enorme tamaño. Incluso para la época tenía unas dimensiones totalmente desproporcionadas. Para su lanzamiento en Japón se tuvo que adaptar el mando, reduciendo de tamaño para el mercado oriental. Adaptación que más tarde llegaría al resto de países, ya que esta versión del mando, un poco más reducida, daba mejores experiencias de juegos. El nuevo mando Duke, adaptado a Windows 10 y Xbox One, saldrá a la venta en navidades de este año.