La cuarta noche y una vaina loca.
Tristemente, tengo que decir que es la noche que menos me ha gustado. No se si es por el exceso de Monsters, o porque la cantidad de horas que pude dormir se podrían contar con los dedos de las manos o de los pies, según el fetiche de cada uno.
La noche empezaba bastante bien, y no es por presumir pero quedé primero en Agar.io, un juego donde eres una bacteria y tienes que comerte otras bacterias para ir creciendo en tamaño. Eso si, fueron los 40 segundos más intensos de lo que llevo jugado a ese juego. He aquí las pruebas del delito:
https://twitter.com/Regik/status/622380123258527744/photo/1
¿Por qué no ha sido la noche que me esperaba? Muy sencillo: la música y sus espontáneos. Definen a TLP Tenerife como uno de los eventos tecnológico más importante de Canarias, inclusive en España. La gente que disfruta de estos eventos son considerados freaks, geeks o personas, según se mire. Yo me incluyo en las etiquetas de geek, freak, otaku, gilipoller y “Gamikero” (concepto).
Los espontáneos fueron pocos pero duraderos, algo que no sería tan malo si fuera para el disfrute de todos. Pero es que uno de los espontáneos que menos me gustó a prisma personal fue el del “perreo”. Básicamente, al son de música de reggaeton y salsa/bachata (lo cual no quiero decir que sea horrible, cada uno tiene sus gustos) varios teleperos y teleperas aprovechaban para perrear y magrearse con otros. Seguramente, llegados a este punto, muchos me dirán que los años anteriores hacían lo mismo, y yo responderé: Correcto, de haber existido Gamika, lo habría escrito igual.
Me parece muy bien que la gente disfrute de ese tipo de bailes o música. Me parece fantástico ya que pueden disfrutar de algo que yo no disfruto igual, o no quiero o no entiendo. Pero nada de eso quita que me incomode el hecho de intentar jugar con mis compañeros al Heroes of the Storm mientras que de fondo se escucha canciones de reggaeton poniendo a parir a las mujeres, y si alzaba la vista ver a varios “teleperos” magrearse o restregarse con otro bajo el pretexto de “Es un espontáneo”. No.
La última noche, prohibido dormir.
Me fui a dormir.
Correcto, me fui a dormir a las 7 de la mañana. Como un campeón, aguanté toda la última noche sin dormir, jugando a Metro Conflict, un shooter free-to-play bastante interesante y que puede dar el bombazo en el momento que pongan servidores europeos, y al Dragon Age Inquisition que Origin lo puso gratuito durante unos pocos días.
La noche a grandes rasgos fue bastante buena. Sufrí nuevamente la música de la noche anterior y algún que otro espontáneo “HOT” pero pude disfrutar de como se liaban a ostias con palos de goma (no soy responsable de lo que acabas de pensar). Lo mejor sin duda es cuando hicieron el “Tú si que vales” versión TLP. Pudimos apreciar a gente talentosa ya sea con instrumentos, improvisación de RAP, e inclusive una bonita cover de I See Fire de Ed Sheeran que espero conseguir un vídeo de eso y publicarlo por aquí.
A diferencia de otros años, me sentí bastante triste, y la razón es que todo lo bueno, se presenta al final y es cuando te das cuenta que todo tiene que acabar. Canciones, risas y anécdotas que se quedarán en ese escenario hasta el año que viene. De esta TLP no me quedo con las competiciones, ni los concursos y sorteos. Me quedo con la gente, con la comunidad, con el buen rollismo que es lo que regalamos en Gamika. Me quedo con esa persona que se sienta a tu lado sin saber quien eres y te ofrece una galleta de chocolate (del que se come). Esa persona que te pide que le vigiles las cosas un momento y cuando vuelve, te regala un Monster. Esa persona que sin interesarle si eres youtuber, viner, blogger, o demás tonterías terminadas en -er, te pide que te unas a su partida de League of Legends. Ese saber estar y buen rollismo que hace que la TLP, por encima de todas las cosas malas que pueda tener, sea fáciles de recordar y sobre todo, echar de menos.
Gracias por acompañar a Gamika en las redes sociales durante esta Tenerife Lan Party, y esperamos que el próximo año nos vuelvas a escoger.
PD: Si, tengo una foto con Maya y Roxy, y tú no.