La industria del gaming móvil acaba de vivir uno de sus movimientos más significativos del año. Scopely, subsidiaria del conglomerado Savvy Games Group, ha oficializado la adquisición del negocio de videojuegos de Niantic por 3.500 millones de dólares, en una operación que se cerró el pasado 29 de mayo de 2025.
Con este acuerdo, Scopely incorpora a su portafolio algunas de las propiedades más importantes del sector móvil, incluyendo Pokémon Go, Pikmin Bloom, Monster Hunter Now, y los servicios sociales de geolocalización Campfire y Wayfarer. Además, más de 400 empleados de Niantic se integrarán al equipo global de Scopely, según detalló la empresa en su comunicado oficial, comprometiéndose a no ejecutar despidos como parte de la transición.
Este movimiento representa una expansión ambiciosa para Scopely, que no solo adquiere juegos de alto rendimiento sino también comunidades activas y tecnologías de geolocalización ya probadas en el mercado. Pokémon Go, en particular, sigue siendo un fenómeno global casi una década después de su debut. Solo en 2024, superó los 100 millones de usuarios activos, y se mantuvo entre los 10 juegos móviles más rentables del mundo.
Desde marzo, cuando se anunció el acuerdo, Scopely ha afirmado que continuará con las hojas de ruta y planes de contenido previamente establecidos por Niantic, sugiriendo una continuidad estratégica más que una reinvención de estos títulos.
Por su parte, Niantic emprenderá un nuevo rumbo tras esta transacción. La empresa se transformará en Niantic Spatial, una compañía centrada en soluciones de inteligencia artificial geoespacial. Aunque ha vendido sus franquicias móviles más reconocidas, Niantic aún conservará dos de sus proyectos de realidad aumentada: Ingress Prime y Peridot, lo que indica que no abandonan del todo el mundo del entretenimiento interactivo.