Microsoft ha recibido el visto bueno para continuar con su plan de comprar Activision Blizzard en Estados Unidos. Así lo ha determinado el tribunal de San Francisco que estaba revisando el caso, al rechazar la petición de la FTC (Comisión Federal de Comercio, en español) de bloquear la operación por motivos de competencia.
Según el documento firmado por la jueza Corley (y difundido por The Verge) la FTC no ha podido probar que la unión de Xbox y Activision Blizzard suponga una monopolización del mercado de los videojuegos. Al contrario, la jueza sostiene que Microsoft tiene el propósito de llevar Call of Duty, y el resto de franquicias de Activision, a más usuarios.
La noticia ha generado diversas reacciones: desde Microsoft, Brad Smith, vicepresidente de la empresa, ha agradecido al tribunal por su fallo y espera que otras autoridades lleguen al mismo veredicto sobre esta controvertida compra. Bobby Kotick, CEO de Activision Blizzard, también ha opinado que la fusión “favorecerá a clientes y trabajadores”, insistiendo en que esta adquisición ampliará el sector en vez de encogerlo.
Por otro lado, Douglas Farrar, portavoz de la FTC, ha expresado su “decepción con el resultado ante el evidente riesgo que implica esta fusión para la libre competencia en los juegos en la nube, los servicios de suscripción y las consolas”. El organismo estadounidense no se da por vencido y anuncia que en los próximos días comunicarán su siguiente paso para seguir en su “lucha por preservar la competencia y proteger a los consumidores”.