Probamos la alfa cerrada de For Honor

Allegro ma non troppo

Este fin de semana hemos podido echarle un vistazo a la alfa cerrada de For Honor, el título de lucha de Ubisoft, donde nos pondremos en el lugar de un vikingo, un samurai o un caballero medieval en una suerte de mundo postapocalíptico donde, oh casualidad, solo sobreviven luchadores de estas tres facciones.

Debo reconocer que quedé totalmente sorprendido e impactado cuando anunciaron por sorpresa el juego en la conferencia de Ubisoft del pasado E3. La mayoría ya habrán visto aquel vídeo inicial en CGI, que volveremos a disfrutar al inicio de esta alfa, y que nos ponía en situación sobre la ambientación del título. Pero cuando realmente este For Honor me dejó rendido a sus pies fue cuando mostraron una partida de larga duración donde lucía en un estado muy avanzado y derrochando carisma.

Con esta alfa creo que se pueden confirmar en gran medida la mayoría de aquellas impresiones positivas que nos dejó el E3.

Al arrancar el juego, y tras pasar los típicos comentarios para que no seamos muy duros con los problemas de la alfa, tenemos que elegir un escudo de armas con un editor bastante completo y seleccionar una facción, lo que nos llevará a un tutorial inicial. Aquí confirmaremos que el estilo de juego es tal y como vimos en julio, más táctico que arcade.

Seguramente los últimos enemigos del tutorial nos habrán dado bastante caña, así que es un buen momento para entrar a los personajes y comprobar todas sus opciones de personalización. En primer lugar las facciones son distintas jugablemente entre sí, pero además podemos ir desbloqueando nuevos personajes con fortalezas, debilidades y habilidades diferentes. Consiguiendo monedas y experiencia para pasar de nivel, así como tomando el botín de nuestras partidas, iremos mejorando armas y armaduras, que pueden ser personalizadas de forma minuciosa, desbloqueando mejoras estéticas.

Además tenemos la opción de ver dos vídeos explicativos -básico y avanzado- de todos los movimientos y combos de cada tipo de personaje, fundamentales para desenvolverse en el juego. Aquí echo bastante de menos que estos movimientos estuvieran incluídos en el tutorial, o al menos que se pudieran practicar de alguna forma, más allá de ver unos vídeos donde los combos salen unos después de otro, sin posibilidad de parar el visionado, retrasarlo o adelantarlo.

Desde luego el juego no es un machacabotones, estilo musou, sino que hace falta práctica y mucha habilidad para poder conseguir buenos resultados.

Una vez metidos en lo serio la alfa nos ofrece tres de los cinco modos multijugador que traerá la versión final: Duel -combate uno contra uno-, Brawl -dos contra dos- y Dominion -donde dos grupos de cuatro jugadores, ayudados por batallones de minions, luchan por controlar tres puntos importantes de cada mapa-. Este modo Dominion es el más interesante y el que se parece más a la jugabilidad que vimos en el E3.

Todos los modos pueden jugarse enfrentado a bots o contra humanos y ya en la alfa está presente la posibilidad de comunicación por voz o chat escrito. El matchmaking se ha portado bastante bien y se puede jugar con bastante rapidez.

La alfa nos trae tres únicos mapas, que se utilizan en todos los modos. Los mapas son bastante distintos entre sí, variando condiciones climáticas, estilo de construcción y lugares de batalla con multitud de obstáculos y caídas que podemos aprovechar en la lucha. Desgraciadamente en el modo Dominion aparecen unos anticlimáticos letreros indicando que en esa dirección está la “Zona A”, que parecen más sacados del Team Fortress 2 que de este For Honor. En mi opinión el minimapa es suficiente para encontrar los puntos sin necesidad de este tipo de incongruencias, ya que tampoco el tamaño de los mismos es demasiado extenso..

Gráficamente el juego se ve muy bien, sobre todo los personajes principales, no tanto así los mapas que son menos impactantes, sobre todo cuando estamos en lugares altos y podemos contemplar gran parte del lugar. Se notan diferencias de calidad apreciables entre unas zonas del mapa y otras, que posiblemente tendrán mejor acabado con la salida del título.

Debemos tener en cuenta, sin embargo, que el framerate se muestra muy estable incluso cuando el mapa se llena de enemigos, con decenas de minions moviéndose. En mi caso con un i7 de cuarta generación, 8 Gb de memoria y una Radeon R9-280, con gráficos a tope, se mantiene siempre a 60 frames fijos como una roca.

Tal y como ya se vio en el E3 uno de los puntos fuertes del juego son las animaciones: muy trabajadas, fluidas y rápidas, y con una respuesta al mando precisa. Me ha encantado la forma de moverse el personaje cuando estamos muy cansados o heridos, realmente realista.

Este del mando ha sido un punto de controversia ya que se decía que la alfa sólo se dejaría manejar con un gamepad, pero no sólo no ha sido así, sino que se puede ir cambiando de pad a teclado sobre la marcha y la ayuda de pantalla se mostrará en función del último método que hayamos utilizado -de forma similar a como lo hace el The Witcher 3-. Como comenta nuestro compañero Prunell en el gameplay, no es que sea especialmente fácil el dúo teclado ratón, pero es jugable aunque parece que de momento es mas cómodo un gamepad.

La parte sonora cumple bastante bien, con músicas adecuadas a la seriedad y oscuridad del título en los menús y un pequeño acompañamiento de tambores durante la batalla, intercalado de gritos de los ejércitos y buenos efectos para representar el combate. Máxima tensión cuando en un duelo en solitario o por parejas nos encontramos en los últimos round, y empieza a sonar un redoblar de tambores que suben la adrenalina.

El juego parece ya en un estado muy avanzado, sin cuelgues, salidas al escritorio ni bugs de calado más allá de algo de “clipping” gráfico muy ocasional y algún clásico de cualquier alfa como personajes que mueren en una escalera y quedan flotando.

En definitiva: un buen sabor de boca inicial, que espero que sea algo más cuando podamos ver el juego en todo su esplendor. Sobre todo deseo que cuente con una buena variedad de mapas, ya que no son muy extensos y pueden hacerse repetitivos.

Por mi parte sólo una preocupación más y es que en la alfa no ha aparecido por ningún lado la opción de campaña para un solo jugador y temo que acabe convertida en un elemento muy accesorio y metido al final un poco con calzador, cuando la ambientación del título podría dar para hacer algo curioso con la posibilidad de unos enemigos finales épicos.